Reportaje a Clemente Arko
Dos generaciones en Bariloche: Padre Pionero, Hijo Refugiero
Refugios de Bariloche
Revista "Al Borde" Noviembre de 1998
- Reportaje por Santiago Storni -
Santiago Storni |
Los pioneros
Tu apellido suena a pioneros...
Sí, mi viejo anda desde el ‘48 por Bariloche, y desde que llegó se dedica a la montaña. También fue la razón por la que eligió Bariloche: un lugar frío y con montañas, como en los pagos donde nació, allá en Eslovenia. La idea era disfrutar de estar en la naturaleza y entre montañas.
Otros pioneros de su época?
Podemos empezar por la gente que hizo el Club Andino Bariloche (C.A.B.) en 1931. El menos conocido: Reinaldo Knapp, era un transportista, amante de la montaña. Y los tres famosos: Emilio Frey, que además de estar a cargo del club estuvo en la intendencia del Parque; Don Juan Javier Neumayer, que fue el primer médico de la zona, y dentro de su consultorio se crea el C.A.B. y Otto Mailing, tan conocido, pionero de todo lo que tenga que ver con la montaña, que le agradece a J. J. Neumeyer que le haya enseñado los deportes de montaña para que él se pueda ocupar de difundirlos. Indiscutiblemente le corresponde el mérito de la difusión, y realizó una obra increíble que está redactada en un libro que mi viejo escribió. Allí se puede leer que Otto Mailing tuvo la primer fábrica de esquíes, la primer escuela de esquí, la primer escuela de enseñanza de montaña, y es infinita la lista de cosas que hizo a lo largo y a lo ancho de Bariloche y sus alrededores.
Y Reinaldo Knapp tiene un refugio con su nombre al lado de la playa de estacionamiento del Catedral, que aunque ahora es mas bien un restaurante, fue el primer refugio que el C.A.B. tuvo en Villa Catedral para poder acceder a las pistas de esquí.
Por supuesto que hay una larga lista de pioneros. Hugo Jung, que hoy es el presidente del C.A.B. es digamos uno de los pioneros más modernos.
Tu viejo, qué hace ahora?
Mientras Hugo se ocupa de dirigir el C.A.B. con la gente de la comisión directiva, mi viejo está en la cabaña de informes. Desde allí se ocupa de transmitir lo que sea de información a todos los que vienen de visita a la montaña. Y con sus 78 años todavía escribe sobre cosas de montaña. Él fue el bibliotecario durante mucho tiempo.
Clemente Arko; foto de la página del Hostel Arko Milena e hijos.
Foto: Santiago Storni |
Crecer en Bariloche
Vos naciste en Bariloche?
Sí; esa fue una feliz idea de los viejos.
Cómo terminaste atendiendo el refugio (Neumeyer)? Cuáles fueron los pasos previos?
La verdad, ni sé muy bien cómo, un día me encontré ahí atendiéndolo. En realidad con ese refugio tengo bastante historia, porque yo venía tomado de la mano de mi viejo el día que eligieron el lugar para construirlo. Yo tendría 6 ó 7 años entonces. (Se inauguró en el ‘71).
Toda mi vida hice deportes. Nuestra casa estaba donde hoy es el centro. Dos cuadras detrás de la casa de mis viejos se acababa la ciudad. Comúnmente íbamos al (cerro) Otto a caminar. Estuve en la escuela juvenil de montaña del C.A.B., en la escuela de esquí... En esa época era lo más común en Bariloche ir a esquiar e ir a la montaña. Era el único club que existía con algo más organizado. Y ahí empezamos a aprender. Y yo me enganché más con el esquí de fondo, con mi padrino Francisco Jerman, que es quien trajo el esquí de fondo a la Argentina.
El de la hostería? El que murió en el Tronador?
Francisco fallece en su casa, aparentemente de un derrame cerebral. Pero el hermano quedó en Tronador, junto con el cuñado. Pero Francisco vivió con nosotros hasta el ‘80, que falleció.
Son los Jerman de la confitería del Campanario?
Sí. Matías el hijo mayor sigue administrando la hostería de los ventisqueros, al final del camino al Tronador. Para nosotros es siempre un lugar muy querido porque allí vamos todos los veranos con Matías, a acampar y a entrenar. Un entrenamiento muy particular: acampar, visitar refugios de montaña y hacer una serie de actividades físicas allegadas a lo que es el esquí. Se esquiaba tres meses nada más, y el resto del tiempo había que entrenar en algo. Entonces íbamos un poco arriba de un kayak, un poco en una bicicleta, un poco corriendo, un poco yendo por los refugios... Y yo me dediqué principalmente a eso. Digamos que nunca me colgué en cuatro patas; siempre anduve sobre dos. Así que todo lo que es escalada en hielo o roca, no es algo que conozca mucho.
Y en el ‘89 un gran personaje que vive en Bariloche que se llama Christian Kim, (que tiene una cristalería, y que inventó una excursión que yo hoy manejo, al refugio Neumeyer) me propuso que hagamos algo en el cerro Otto, para reconstruir y poner en condiciones el mundo de Otto Mailing. Otto todavía vivía, y armamos una excursión que se llamaba “Esquí Nórdico Cerro Otto”. Y empezamos a hacer un esquí de fondo comercial en Bariloche. Hoy en día Fabián Eiras, que está arriba, por cosas del avance existe un refugio al lado de las pistas de esquí, y él armó todo un centro de esquí de fondo muy lindo ahí en el cerro Otto. De hecho hay pistas muy buenas donde se hacen competencias internacionales. Así que ahí empecé con lo de trabajar en un refugio, en el Otto, y con una excursión .
El refugio J. J. Neumeyer
Y las vueltas del comercio me llevaron a trabajar al refugio del Challhuaco; el J. J. Neumeyer donde hoy estoy. La idea era buscar un lugar donde hacer esquí de fondo. Y así fue que llegué a un refugio de montaña. Un refugio particular, porque se llega en auto. En el invierno se complica porque tenemos mucha nieve, y la única forma de llegar es en doble tracción, y eso para el desarrollo turístico es un poco más complicado. Al Otto se llega con coches normales, gracias a un esfuerzo muy importante que hace Fabián por limpiar el camino para que todos puedan llegar a su centro de esquí. Pero el piso del camino del Otto es firme; el nuestro no tanto. Entonces si le sacáramos la nieve, habría que enripiarlo. Entonces por ahora llevamos nosotros a con vehículos doble tracción a la gente en invierno. Así que estamos haciendo crecer un lugar con la idea de que albergue actividades de iniciación a la montaña.
El incendio
El valle del Challhuaco fue muy nombrado cuando los incendios más importantes del ‘96, no?
Sí, el debut de esta concesión fue ese verano. Yo empecé un 1º de noviembre del ‘95 y para el 8 de enero del ‘96 prendieron el valle, y encima era un día de 70 km./h de viento, y realmente la historia era... difícil de contar. Un par de amigos fotógrafos nos regalaron unas fotos que guardamos en el refugio, para tratar de dar una idea de cómo fue esto del incendio.
Qué se ve en esas fotos?
Un camión tratando de echar agua, y ves las dimensiones de las llamas en comparación con el camión...
El incendio se fue acercando rápido?
El fuego viajó a una velocidad impresionante. Llegaron a medir un avance de 16 metros por minuto. El bosque alto de lengas es lo más preciado que tenemos, por su lento crecimiento y porque ahí hay 18 trabajos de investigación en biología, entre los cuales viene gente de la Universidad de Chile y del Co.N.I.C.E.T. a hacer estudios.
Las coincidencias, las fuerzas de la naturaleza, o yo creo que porque Dios es grande, la realidad es que cuando llegó el fuego al bosque alto, el clima cambió y bajó la presión. Y la presión baja aplasta el fuego contra el piso, y en ese piso hay exclusivamente flores de Amancay. Es una pradera inmensa como una alfombra de flores, y no hay otra cosa. Así aplastado contra el piso, el fuego se movía muy lento, y los muchachos de Parques trabajaron, y también unos amigos que nos vinieron a ayudar, como si fuera la última vez... esas treinta y seis horas... Y se pudo frenar el frente del avance del fuego.
Vos también trabajaste de bombero?
Sí. El meterse es un tema, porque por un lado no dejan, lo cual es lógico porque si no sabés alguien te tiene que cuidar, y eso es más perjudicial que si no ayudaras. Pero mi socio Adán sabe mucho de fuegos, y entonces fuimos “de la mano” de él. Y... se estaba quemando mi casa..! Porque el valle es mi casa. Así que entramos medio “de prepo”, y fuimos a trabajar igual. Y el fuego paró, y el bosque se salvó; toda la parte del bosque alto, por suerte se salvó.
Los refugios
Cada refugio tiene un perfil distinto, no?
Sí. A los viejos, si se les hubiera hecho más caso... no estaban nada equivocados. Inclusive la investigación de Bailey Willis, acerca de dónde había que instalar Bariloche, no estaba equivocada.
Refugio Frey
No se la tuvo en cuenta?
No. Él decía que había que instalar el pueblo hacia el norte de la boca del Limay, más en la estepa, con lo cual todos los bosques quedaban sin casas. O sea que era mucho más conservacionista. Él lo veía desde un punto de vista industrial, pero su proyecto hasta ecológicamente era bueno.
Los refugios tienen una elección que los viejos hicieron, de que cada uno tenía una razón de ser.
* El López se hizo porque era el de más fácil acceso en esa época, e indiscutiblemente su paisaje es algo único. No hay otro refugio que tenga un paisaje tan maravilloso. Tiene nieve en la hoya hasta muy tarde, y tiene alguna posibilidad de escalar (aunque la roca no es la mejor; metamórfica, se rompe).
El paredón que da a Bahía López es interesante, no?
Sí, y también está la Lürs y la Torre Principal, que también son interesantes.
* Después, el Refugio Frey es el centro indiscutido de esclada, por su roca de granito anaranjado. Al contrario de la anterior, ésta es una roca maravillosa, muy segura.
* Y en el Tronador hay dos refugios: el viejo y el Otto Mailing.
Santiago Storni en la puerta de entrada del Refugio Frey.
Foto: Santiago Storni
El viejo funciona?
Lo arreglaron bastante. No está concesionado, pero hace tres años que le hicieron una muy buena manutención, así que está bastante bien.
Uno puede pedir la llave e ir?
Los refugios siempre están abiertos, sin llave, por una cuestión de seguridad. Lo cual es difícil en nuestro país donde la transgresión es algo muy común. Pero es una necesidad para el montañés. Esto le cuesta caro muchas veces a los refugieros, porque nunca falta alguno que no entiende nada, y hace algún lío arriba en el refugio, que después hay que andar arreglando. En el Tronador se va a practicar hielo.
* El Jackob es el refugio de las travesías. Desde este refugio San Martín hay picadas a diferentes lugares, bajando al Mascardi, o yendo para Laguna Negra o para Tronador... Es como un epicentro de travesías.
* Laguna Negra lo que tiene de particular es el camino al refugio. El valle de la picada que va a Laguna Negra es único; es algo muy particular.
* El refugio donde vivió Otto Mailing se llama Berhof, y hoy es un museo, en el cerro Otto, y es el lugar de historia de la montaña.
Y el Neumeyer donde estoy yo, es para el inicio de toda persona que quiera hacer sus primeras armas en la montaña. Porque tiene picadas muy cortitas, de 15 minutos, donde turísticamente llevamos personas de hasta 80 años; o combinando actividades hay caminatas de 4 ó 5 horas. Ahí no importa la edad; aunque seas viejo tenés para divertirte.
Por eso entonces, ser refugiero es muy distinto en cada uno. En uno tenés que saber escalar, en otro saber atender bien a un turista que no sabe nada, tener más paciencia y dar explicaciones sencillas. En el Frey por ejemplo, se dan por obvias un montón de explicaciones, porque si llegaron hasta allí es porque muchas cosas ya las saben. En el Mailing el refugiero debe saber de hielo, y todo lo que tiene que ver con el Tronador y la climatología... Ser refugiero tiene una diversión o un atractivo particular según dónde estés.
Refugio Otto Meiling. Foto: Santiago Storni
Otras excursiones
Hablemos un poco de picadas menos transitadas. Jackob-Laguna Negra, está abierta o no?
Si uno sale de la laguna Jackob y se va a la Témpanos, y desde allí sube hasta el paso junto al pico Refugio, ése es un paso complicado. En el verano, cuando ya no queda nada de nieve, es un paso en la piedra. Hace falta una cuerda, alguien que la sepa manejar, y que sepa hacer los seguros adecuados. Y en el invierno y hasta muy entrada la primavera, es una cara sur, donde guarda la nieve hasta muy muy tarde. Y por ser una cara sur, a la tarde se afloja la nieve y a la mañana está muy congelada. Además por ser una pendiente pronunciada y que termina en corte, sin un lugar donde parar, hace que sea un paso peligroso. Por eso se desaconseja a la gente ir, salvo que vayas con un guía. La excepción se daría si alguien insistiera y si el refugiero evalúa que esa persona sabe y tiene los elementos necesarios, lo puede dejar. La idea es que vaya solo gente que sabe, o que vayan con un guía.
Porque hay un concepto peligroso de lo que es la aventura. Como si exponerse al riezgo fuese sinónimo de aventura. Y en la montaña ese concepto es muy peligroso. Nosotros tenemos otro concepto de la aventura: es lograr hacer algo bajo condiciones 100% seguras, y que el evento que hacemos en sí mismo sea divertido y nos produzca una satisfacción de adrenalina, pero no el hecho de estar exponiéndose. Ahí hay una diferencia muy importante. Una cosa es correr con el auto por la ciudad, entre los semáforos, y otra es hacerlo en un autódromo. Hay una enorme diferencia.
Contra ésto se está trabajando mucho. La cabaña de informes del C.A.B., los permisos de Parques de trekking, etc. buscan que quien va a caminar, que antes vaya a buscar información. El permiso es gratuito.
Permiso de trekking?
Cada caminante debería tener uno, que es un aviso de cuándo se va, a dónde va y cuándo piensa volver.
Interior del Refugio Otto Meiling. Foto: Santiago Storni
Dónde se tramita?
En la cabaña del C.A.B., en Parques Nacionales, en los guardaparques y en los refugios.
Existe un nuevo refugio en el cerro Capilla, que no es del C.A.B. si no del Club Andino Esloveno. Viene a ser el segundo refugio de este club, no? aparte del Piedrita...
Tal cual. El Piedrita, tan conocido por el camino al Frey y por lo bonito que es, tiene ahora un hermano en el Capilla. Los eslovenos tienen una afinidad con este cerro: primero subieron la cruz a la cumbre, que el viento se la tiró. Entonces volvieron a subir una segunda cruz pero hecha de caños, para que no se caiga. Caños de hierro, o sea que... había que subirla, no? Sin helicóptero.
Y esta vez montaron una estructura metálica, con un techo parabólico, donde caben ocho personas durmiendo cómodos. Está hecho todo en material. Lo subió un helicóptero y lo montaron después arriba. Porque es un lugar bastante expuesto, con posibilidades de avalanchas de nieve en el invierno, entonces lo hicieron indestructible, tipo búnker.
Lo que passa es que llegar al Capilla es complejo. Hay que hacer un cruce en una lancha que no va todos los días. Así que hay que armar el grupo, conseguir el bote que los lleve, hacer la excursión y que el bote los esté esperando para traerlos de vuelta... Como el dicho alemán: “Para qué vamos a hacer las cosas sencillas si complicadas también se pueden hacer ?!” Allá arriba fueron los eslovenos, pero bueno, ahí tienen otro refugio.
Y ahora el C.A.B. está viendo si arreglan el Dormilón, del otro lado de Villa la Angostura, por el lado del brazo Machete; van a ver si lo ponen de vuelta en condiciones.
Refugio Piedrita
También se accedería en lancha?
Es más fácil. Se puede ir por tierra pero la vuelta es más grande. Y después también están los dormideros de Villa Horrible, donde estuvo alguna vez el refugio Ñireco, al pie del cerro Meta, que se quemó; y el Velco, que está al fondo del río Ñirihuau. Ése sería más hacia la zona de la estepa. Como a la altura del refugio Neumeyer, detrás del cerro Ventana, que la gente conoce más desde el lado del Gutiérrez. En esos dormideros entran entre ocho y diez personas, y no hay cuidador ni nada.
Hay picadas que se han vuelto peligrosas porque se van cerrando? No me refiero a las que van directas a los refugios si no más bien a las que unen un refugio con otro, o a las que mencionaste antes al Mascardi o al Tronador desde el Jackob...
No. Se está trabajando mucho en mantener las picadas en condiciones. Las picadas que están marcadas en el mapa de Afredo Slipeg, están con un punteado distinto las que están bien marcadas y las no tan bien marcadas. Obviamente se intenta mejorar las que no están bien marcadas. Y también se intenta, aunque es difícil, que las que no están en el mapa, desaparezcan.
Para que nadie se mande por ahí...
Tal cual. Es difícil donde hay animales, porque el animal sigue transitando la senda. En cambio donde no hay animales, la picada va desapareciendo.
Para no pasarla mal
Existe un grupo de rescate?
Hace 60 años ya que existe la comisión de auxilio del C.A.B.
Hay crónicas, no?
Hay un librito entero, sobre anécdotas de la comisión, de rescates en la montaña. Es la gente que más queremos que no trabajen, igual que los que apagan incendios forestales. Están para ir a buscar a la gente que está en problemas: accidentes por fracturas, golpes graves, o extraviados. Al haber mejor información, con el mapa de Alfredo y con la mejora de las picadas, el tema de los extraviados por suerte practicamente desapareció de la comisión de auxilio. Y esa fue una alegría muy grande de los últimos cuatro o cinco años.
Cómo llega el aviso a la comisión? Por radio?
Hoy la comunicación es muy buena por suerte. Entre los teléfonos celulares y las radios (todos los refugios tienen VHF). Hay una frecuencia destinada a la comisión de auxilio, y ése es el camino más frecuentemente utilizado. La otra, es que alguien baje hasta algún lugar y mande el aviso. Como mínimo debería haber tres integrantes en cada caminata, así si alguien se lastima, uno se queda con él, y otro baja a pedir ayuda. Sin duda siempre conviene llevar un VHF o un teléfono celular, sobre todo si el grupo es numeroso, donde estadísticamente hay más probabilidad de que a alguien le pase algo, o necesiten algo, o de que se retrasen respacto al horario convenido de transporte, o alguna cosa así. Eso por suerte se está usando cada día más, y está cada día más accesible, y son cada vez más chiquitos y más livianos.
Refugieros ´99
Quiénes van a estar este verano en cada refugio?
En el López va a estar Mariano Santonato, que ya viene de los últimos años.
En Laguna Negra va a estar Willy (Guillermo) y “el Colo” (Gabriel), que estuvieron también en los últimos dos ó tres años.
En el Mailing va a estar Sergio Barbagayo, que está desde hace unos cuantos años, aunque al que van a ver más es a Nico Betinelli, porque Sergio trabaja más en la ciudad y Nicolás más en el refugio.
En el cerro Otto siguen Flavia Torrecelli y Eduardo López, que ya están desde el ´92.
En el refugio Neumeyer va a estar Adán Barrientos y Clemente Arko.
Y en el Jakob va a estar Claudio Fidani, que viene estando desde hace unos cuantos años.
Refugio López
Y en el Frey?
En el Frey está Nicolás de la Cruz. Y generalmente hay alguien más: Pedro Lüti, que está todo el año ayudándolo allá arriba. Pedro es un personajemuy particular: gruñe... pero no muerde. Si gruñe hay que hincharlo un poco y afloja.
Nicolás de la Cruz, hermano de Sebastián...
Sí. Nico estuvo arriba, en el Himalaya...
En el Xixa Pangma.
Exactamente. Él estará en el Frey.
Y los hermanos Lamunière? (Chulengo era refugiero del Jakob hace años)
Chule y Andy se están dedicando a guiar. No están en refugios pero Andy sigue siendo el indiscutible referente de los guías de trekking de Bariloche; y Chule es el referente de lo que es alta montaña, roca y sobre todo hielo y Tronador. Ellos trabajan en la profesión de guías de montaña, y son los más buscados en Bariloche para eso.
La gente del Challhuaco
Qué perfil tienen tus pasajeros?
En el refugio Neumeyer hay muchas familias que vienen a hacer sus primeras experiencias, o viene la gente que le gusta disfrutar de un refugio con confort. El que viene a caminar se sorprende porque encuentra una variedad muy grande de paisajes. Lo están descubriendo como a otra posibilidad para caminar. La diferencia está en que tenemos una vegetación muy variada: la estepa, la vegetación alto-andina y el bosque. Enuna o dos horas de caminata pasás por las tres zonas.
Y para los que les gusta sufrir, también hay. Tenemos picadas largas. Porque hay un mito en algunos que creen que tienen que ir a sufrir ala montaña. Por suerte se está dejando de lado. Pero para esos también hay algunos buenos pedreros, algunas lengas achaparradas, y otros ingredientes.
Refugio López. Foto: Belen Etchegaray
Qué le dirías a quien considera que “el mochilero está fuera del mercado”?
Depende del punto de vista desde el cual hable. El mochilero realiza un turismo relativamente económico. Entonces lo puedo entender unicamente desde ese punto de vista. Pero desde lo que yo veo todos los días en Bariloche, lo que vemos en los campings y en los refugios, en ese sentido quien diga eso se equivoca. Porque ante una dificultad económica en el país, uno quiere irse de vacaciones igual. Y ponerse una mochila e ir al camping y a los refugios, se transforma en que el costo está en llegar a Bariloche, y nada más. El resto gastás casi la misma plata que si te quedaras viviendo en tu casa: $ 6.- una noche en un refugio, $ 5.- ó 6.- una noche en un camping, el resto es la comida. Y caminando, o con una bicicleta con alforjas, es algo muy común. No sólo argentinos, también de septiembre a diciembre extranjeros, que con mochila recorren toda la Patagonia, a dedo, caminando, etc. Es cierto que de ellos son pocos los que consumen excursiones turísticas; aunque hay también quien, por un día, deja la mochila y contrata un rafting o una cabalgata, sin llegar a entrar en el turismo convencional. Les gusta el contacto con la naturaleza y buscan eso. La gente que viene a mi refugio en el invierno a hacer esquí de fondo, son argentinos que vienen a través de agencias de turismo, pero especializadas, que ya están apareciendo en las grandes ciudades, aunque todavía son muy poquitas. La mayoría del público restante van a las agencias de turismo masivo, que hacen Circuito Chico y Catedral. Pero a ese tipo de agencias no va a llegar nunca el público que nosotros trabajamos. Incluso, hay mucha gente interesada en hacer excursiones exclusivamente de turismo aventura: andar a caballo, en bicicleta, bucear, escalar en roca, en hielo, o un rafting, y que no encuentran en las agencias habituales una respuesta a lo que buscan. Desde la cabaña de informes del C.A.B. les podemos dar esa información que vemos que no encuentran en las agencias de turismo convencional. O que nos escriban y nosotros les enviamos un fax o un correo electrónico con los datos que precisen. Hemos recorrido con un amigo agencias de turismo convencional, y vemos que no conocen estos otros productos o servicios de aventura.
Esa división, de que hay dos públicos diferentes, es la que quizás no considera quien deja afuera al mochilero, cuando en realidad también es parte del público que hace turismo de aventura. Y está muy arraigado. Desde que soy cihquito, y tengo unos cuantos años, el mochilero sigue estando firme ahí, todos los veranos.
Contratar una excursión
Qué les aconsejarías a los que van por su cuenta: que hagan todo por su cuenta?
En la vida hacer solo lo que vos ves tiene muchas limitaciones; por eso uno se junta con amigos, que te cuenten otras opciones. En la oficina de informes del club, intentamos ser un amigo que conoce, para contarles. Además creo que conviene, no sólo por información si no también por seguridad.
Existe la gente que viene a Bariloche con su auto, y al tercer día dicen: “Esto es todo igual: son montañas, bosques y lagos”. Pero cuando alguien te guía, y te cuenta el por qué de este lago y de este otro, qué pasó acá y qué pasó allá, cómo se llama la planta ésta y el árbol aquél... Todo eso va a hacer que lo que el turista viva sea totalmente distinto. Es cierto que tiene un costo extra porque hayq ue contratar a alguien que sabe, pero tiene un beneficio muy grande. Quizás convenga ir mechando. Hacer parte por su cuenta y parte contratar algo. Lo que le dé el bolsillo a cada uno. Pero yo no haría las cosas solo siempre; buscaría intercalar y consultar.
Refugio Berhoff. Foto: Santiago Storni
Acerca del Eco-Challenge
Entrenaste un equipo para Marruecos?
Sí. Yo soy Profesor de Educación Física, y chicos de Bariloche que entrené en el esquí de fondo en la época en que me dedicaba a eso, vinieron a verme porque iban a ir a Marruecos y tenían que conformar un equipo, lo cual no es tarea sencilla. Porque tiene que haber cuatro personas que convivan a lo largo de diez días, en una situación muy estresante. Y éste es u nuevo concepto de deporte: una actividad donde la relación humana entre los integrantes y el espíritu de buena onda, y llevarse bien, y ver lo positivo, es lo que en realidad sostiene la posibilidad de mantenerse en la competencia, y de llegar, y en lo posible llegar bien. Y bueno, me pidieron ayuda en trabajar eso, en armar el equipo. El interés era muy grande. Sebastián de la Cruz consiguió, eso es un mérito de él, que el año que viene se haga en la zona del Corredor de los Lagos, cerca de Bariloche, entre San Martín (de los Andes) y Esquel. Vamos a ver dónde eligen. Su hermano Nicolás está trabajando en la elección de los lugares. Y los dos estuvieron en Marruecos trabajando en la organización para después poder ponerla en funcionamiento acá en la Argentina el año que viene. Y de Argentina fueron tres equipos: uno con interantes de Bs. As. y de Esquel; ese equipo se llamaba “Argentina”. Había otro que se llamaba “Patagonia” que lo integraba gente de la zona de Bariloche, y después estaba el equipo “Bariloche” que lo integraban los chicos con los que yo estuve.
Lo muy representativo es que, salvo raras excepciones de empresarios de buena onda que siempre hay, el resto (del dinero necesario) lo pusieron los mismos chicos, como suele suceder en el deporte argentino. Y así es mucho más complejo: te entrenás en los ratos que no trabajás, o sea que se lo robaste a la familia, y encima te tenés que comprar todos los chiches necesarios para poder participar; además de pagarte el viaje y la inscripción. O sea que nuestros deportistas hacen de empresarios y corredores. Y esto es muy importante, porque muchos de los otros competidores son profesionales, que les pagan por hacer eso.
Largaron 54 equipos; llegaron solo 32. Y los chicos del equipo “Argentina” salieron 11ºs, donde hasta el último día venían 7ºs, y por un error de navegación se rezagaron. El grupo “Bariloche” llegó 20º y el Patagonia 27º. O sea que los tres equipos argentinos llegaron, entremedio de los profesionales. A los tres equipos hay que reconocerles que hicieron un trabajo fantástico.
Y bueno, vamos a ver qué pasa el año que viene acá. Porque en casa, para empezar hay que gastar mucha menos plata, o sea que es más fácil estar. Y se conoce mejor el terreno y veremos, quizás nos vaya un poco mejor.
Puede haber más de tres equipos argentinos?
No sé cómo funcionan los cupos, pero no me cabe duda de que los que fueron a Marruecos dejaron un papel tan bien sentado, que si alguien más quisiera participar, y hubiese lugar, seguro que le van a dar lugar, porque dejaron muy bien parado a lo que es el deporte argetino.
No hubo mucha difusión de ésto acá en Buenos Aires. Quizás en Bariloche sí.
No, en Bariloche tampoco. Los deportes que no hacen taquilla lamentablemente cuesta su difusión, no? Y en este caso... fueron realmente de incógnito.
Interior del Refugio Berhoff. Foto: Santiago Storni
Aprender de la naturaleza
Yo invitaría a todos a que busquen más naturaleza. Sobretodo a los que viven en las grandes ciudades. Que no pierdan la oportunidad de ir a cualquier lugar de naturaleza a disfrutar. Porque si pudiéramos conocer más las leyes de la naturaleza y aplicarlas a nuestra vida cotidiana, a mí no me cabe ninguna duda de que viviríamos mucho mejor.
Para empezar entenderíamos que la naturaleza no hace lo que nosotros queremos, con lo cual achicaríamos la soberbia. Y por el otro lado veríamos que hay un millón de fenómenos que nos dan explicaciones a un montón de dolores de cabeza que todos los días nosotros no sabemos resolver, y que la naturaleza ya los resolvió, y con copiarlos se acabrían nuestros problemas. Ésto puede sonar simplista, pero es así.
Por ejemplo?
Las lengas dejan caer todos los años las hojas para que la nieve no se les junte arriba de la copa. Al no tener follaje, la nieve se cae al piso y el árbol se mantiene en pie. Si tuviera todo el follaje, con un metro de nieve encima, el árbol se caería. Y no hubo que enseñárselo. Y como ése hay millones de ejemplos. El ser humano todavía no se dio cuenta de que todas las especies cuando disminuye el alimento, disminuye la población, y la aumenta cuando hay más alimento o más espacio. Nosotros no cumplimos eso. Y tenemos bastante problemas al respecto. Hay infinidad de ejemplos. Es cuestión de ir y meterse, y uno aprende.
Me hacés pensar en otro tema: la basura...
Bueno, hay algunos que estamos orgullosos del público que nos visita. Por ejemplo en nuestro valle es así. Realmente la gente que nos visita no nos hace juntar basura. Y cada vez se junta menos basura en los lugares menos accesibles. Como que el que hace un esfuerzo por llegar a un lugar, lo cuida más. Nos sigue costando bastante más trabajo en los lugares con acceso vehicular.
El “Día de las montañas limpias” se organiza todos los marzos en Bariloche, y todas las instituciones salen a diferentes lugares a limpiar la naturaleza. En el C.A.B. hace dos años hicieron, con lo recolectado en un solo día, una montaña con una base de seis contenedores por otros seis , todo lleno de bolsas de consorcio y de unos cinco metros de altura! Eso quiere decir que tenemos todavía mucho que aprender. Pero va mejorando. Es notorio como la gente va tomando conciencia; como los sistemas de educación van lográndola, como un nene chiquito le tira del pantalón al padre y le dice “papá, tiraste el papelito”. Eso significa que las nuevas generaciones vienen con más conciencia. Y eso da aliento para que la gente que trabaja en ésto y los que nos gusta ésto, sigamos soñando que algún día no va a hacer falta limpiar más nada.
Fotos: Santiago Storni