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Kurt Albert. Adiós al inventor del "Rotpunkt"
28/09/2010
Kurt Albert (Alemania, 1954 - 2010), profesor de Matemáticas y Física, forma parte de la historia no sólo como el creador del Rotpunkt, sino por haber extendido este concepto por los distintos ámbitos de la escalada y el alpinismo.

Kurt Albert el inventor del ‘Rotpunkt’. Foto: Sergio Prieto
El simple hecho de comenzar en 1975 a pintar un pequeño punto rojo en la base de las rutas que conseguía subir sin caídas y sin reposar de los seguros revolucionó en poco tiempo la forma de entender la escalada en todo el mundo y trajo consigo la aparición de la deportiva tal y como la entendemos hoy día.
Fuertemente marcado por la arenisca del Elbsandstein, sus escaladores y sus reglas escritas (no utilizar fisureros –sólo nudos empotrados–, no usar magnesio, no colocar más de dos seguros cada ocho metros…), Kurt Albert desarrolló la idea del rotpunkt en Frankenjura y fue cosechando metas en forma de grados: Exorzist (7a) en 1976, Santanz (7b+) en 1981, Magnet (7c) en 1982...
Es una década trascendental en el desarrollo de la escalada deportiva. Frankenjura se convierte en un continuo centro de pregrinación de los mejores escaladores del mundo y los más influyentes de de aquella época. Por la casa de Kurt y Wolfgang Güllich, con quien vivió varios años hasta su accidente mortal en 1992, pasaron Ron Kauk, Jerry Moffat, Ben Moon, Henry Barber...
De la escuela a las paredes
Su primer viaje a Yosemite (1977) y el encuentro con Ron Fawcett, Peter Livesey y Ron Kauk también debemos entenderlo como una influencia clave, no para el rotpunkt en sí, pero sí para lo que vendría después y lo que denominó como su “máximo reto”: encontrar grandes rutas que ofrecieran la posibilidad de escalar en libre.
En 1986, sus liberaciones a la Vía de los suizos (7b+), Cima Ovest, y a la Brandler-Hasse (7a+), Cima Grande, en Dolomitas, son un anticipo de su exportación de la escalada libre de dificultad y el punto rojo a las grandes paredes alpinas del mundo.
En 1988, la Eslovena a la Torre sin Nombre del Trango sigue el camino de las anteriores (7a+). Un año después, en la misma montaña, abre, junto a Wolfgang Güllich, Christof Stiegler y Milan Sykora, Eternal flame (7b+/A2); en 1991, Riders on the storm (7c/A2) a la Torre Central del Paine, con Bernd Arnold, Norbert Bätz, Peter Dittrich y Wolfgang Güllich; 1995, Royal flush (7c), en el Fitz Roy, junto a Bernd Arnold, Jorg Gershel y Lutz Richter.
Escalada libre
Pero Kurt nunca buscó proclamarse como el nuevo profeta de la escalada. Explicó que su propuesta no debía concebirse como un dogma, ni siquiera como una filosofía, simplemente como una nueva manera de subir por las rocas que podía trasladarse a todos los ámbitos de la escalada. Tampoco imaginó la gran trascendencia posterior del rotpunkt en todas las paredes del planeta.

Kurt Albert escalando
Cuando, con 14 años, comenzó a escalar le chocó que a los escaladores de su entorno sólo les interesase subir, no el cómo se hacía. Por esta razón surgió el rotpunkt. Inspirándose en las reglas de Elbsandestein, pero descartando la licencia de reposar de las anillas, en Frankenjura cuaja la idea de lo que actualmente entendemos como “encadenar”: escalar de primero, sin caer y sin reposar en los seguros ni ayudarnos de ellos para subir.
Paradójicamente, Kurt huyó de las reglas y mucho más de establecerlas. La escalada debía ser “libre”, no una actividad sometida a normas que limitaran la creatividad.
En cualquier caso, la escalada, libre y deportiva, en escuela y en paredes, se lo debe casi todo a Kurt Albert y a aquel inocente gesto que consistió en pintar un punto rojo en 1975 bajo la vía Maria Schrott Gedächtnisweg (6a).
El control subjetivo
Aunque las increíbles imágenes de sus solos integrales, escaladas en pared, descensos en kayak, saltos en torres... pueden darnos la imagen de un Kurt que se exponía en exceso, todo el riesgo se encontraba perfectamente medido y siempre evitó jugar a la ruleta rusa.
De hecho, los peores momentos de sus escaladas, y de los que no disfrutaba en absoluto, los vivía cuando su seguridad dependía en exceso de factores externos e imprevistos, como la caída de un serac. Él llamaba a esas situaciones “choques de adrenalina”. Su estrategia consistía en encontrar el equilibrio entre miedo y pánico; dominar la situación, los movimientos, las decisiones; buscar alternativas con una seguridad más subjetiva, y no perder el control.
Pese a todo, no existen paredes de 1.000 metros seguras y el control subjetivo es una cosa y la realidad otra muy distinta. El precio que se paga por disfrutar de la aventura y una vida intensa es a veces muy alto; él lo sabía. En muchas ocasiones se anda sobre un delicado filo, y precisamente este camino supuso su gran estímulo vital.
Pero Kurt tuvo suerte y reconocía ser afortunado en toda su vida de expediciones y escaladas. Tan solo había sufrido unas cuantas tendinitis provocadas por sus odiados monodedos de Frankenjura, alguna dolencia de espalda tras acarrear enormes petates, una rotura del tendón de Aquiles al fallar en un salto en Checoslovaquia y una brecha en la cabeza cuando le cayó una piedra en los Alpes.
El 26 de septiembre Kurt pisó en el lado prohibido del filo. Cayó casi 20 metros cuando escalaba una vía ferrata en Baviera.
Fuente :www.desnivel.com
Grave accidente de Kurt Albert mientras realizaba una ferrata
28/09/2010
El padre del Rotpunkt, y una de las leyendas de la escalada libre, sufrió una caída el pasado día 26 de Septiembre desde 18 metros mientras realizaba una vía ferrata en Hirschbach, por motivos todavía no conocidos. Transportado por un helicóptero al hospital, en estos momentos se debate entre la vida y la muerte con graves lesiones que según los médicos son muy preocupantes.

Kurt Albert a sus 56 años. Foto: cortesía de Martin Schepers
Actualización 29-09-2010: Finalmente los peores pronósticos se han confirmado y Kurt Albert falleció ayer a las 20:45h según han confirmado la policía local y los médicos del hospital de Erlangen, que certificaron su fallecimiento.
Desde Barrabes nos queremos sumar al sentimiento de dolor de la comunidad montañera por la perdida de este gran escalador y trasladarles nuestro pésame a su familia y amigos. ¡Descanse en paz!
Aunque tanto klettern como montagna.tv y numerosas web informan del fallecimiento de Kurt Albert, otras informaciones indican que está siendo ventilado artificialmente todavía. La información del enlace a pie de página y que circula por la prensa alemana tiene que ser confirmada. Rectificamos la información anterior hasta confirmación oficial.
El pasado día 26 de septiembre a las 12:00 de la mañana Kurt Albert, el padre del Rotpunkt, sufría una caída desde 18 metros de altura mientras realizaba una vía ferrata en Hirschbach, a 40km de Nuremberg. Albert, de 56 años de edad, era trasladado en helicóptero a un hospital en estado muy grave. En estos momentos se encuentra entre la vida y la muerte y según los médicos la situación es muy preocupante.
No sé sabe cual fue el motivo del accidente, pero la policía de Oberpfalz ha abierto una investigación que quizás pueda aclarar lo ocurrido. De momento afirman que no se observan indicios externos que hayan forzado la caída.
Nacido en 1954, Kurt Albert creó en 1975 el rotpunkt. Gran defensor de la escalada libre, uno de sus objetivos siempre han sido liberar grandes vías que hasta entonces se realizaban en artificial. Un viaje a Yosemite en 1997 marcó su forma de entender la escalada. Junto a Gullich fue uno de los primeros en trasladar el estilo libre a los Big Walls, dejando constancia de su paso en numerosas grandes paredes de Karakorum, Patagonia, Venezuela, con vías que continuan siendo míticas a fecha de hoy, como Eternal Flame en la Torre sin Nombre, o Riders on The Storm, en la Torre Central del Paine...
Fuente: www.klettern.de - Barrabes.com
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